También critican que la Fiscalía Nacional Económica haya desistido de la denuncia por presunta integración vertical que en 2013 el gremio local presentó contra isapre Banmédica.
Con optimismo recibieron los dirigentes del Colegio Médico Valparaíso la decisión de la Superintendencia de Salud de formular cargos contra las isapres Banmédica, Masvida y Cruz Blanca por incumplimiento a la norma que prohíbe la dualidad de funciones entre los ejecutivos de los holdings propietarios de las entidades y las respectivas prestadoras de salud. No obstante, también lo califican de “tardío”, considerando que en 2013 el Colegio Médico Valparaíso presentó ante la Fiscalía Nacional Económica (FNE) y la Intendencia de Prestadores (dependiente de la Superintendencia de Salud), sendas denuncias en contra de Banmédica por presunta integración vertical, las que fueron desestimadas.
“Esto que está haciendo la Superintendencia de Salud es muy bueno, pero bastante tardío respecto de lo que como Colegio Médico Valparaíso habíamos detectado hace años atrás. En enero de 2013 presentamos requerimientos tanto en la Fiscalía Nacional Económica como la Intendencia de Prestadores usando información y documentación similar a la presentada ahora, y ninguno fue contestado en el tiempo en que debió hacerse, se respondió un año después y en forma muy evasiva, relativizando el concepto de integración vertical”, afirmó el Dr. Juan Eurolo, presidente regional del Colegio Médico.
En efecto, en el caso de la denuncia presentada ante la FNE, ésta comunicó –un año después– que había resuelto archivar el expediente del caso, señalando que “la integración vertical entre prestadores e isapres puede producir efectos ambiguos, es decir, que no es posible determinar de un modo abstracto y general si dicha integración genera efectos negativos o positivos en términos de bienestar”. Lo anterior sorprendió en su oportunidad a los dirigentes gremiales, por cuanto la FNE no desconocía la existencia de la integración vertical entre clínicas e isapres, pero igualmente desestimaba la denuncia de los médicos.
En tanto, respecto de la denuncia presentada ante la Intendencia de Prestadores, sólo se recibió comunicación informando que había sido admitida a tramitación, sin que hasta el día de hoy se advirtiera del resultado de alguna investigación que se estuviera llevando a cabo.
Para el presidente regional del Colegio Médico resulta preocupante que con toda la documentación entregada en su momento las denuncias no hayan prosperado, y teme que pudiera haber una relación más allá de lo meramente formal y legal entre quienes dirigen transitoriamente los organismos sectoriales llamados a fiscalizar y los grandes grupos empresariales, como se ha visto en otros casos. ”Muchas veces quienes han ejercido estos cargos de vigilar el comportamiento de las empresas, como las Superintendencias, cuando salen de sus cargos aparecen en los directorios de estas mismas empresas. Creemos que ha habido también una falta de acuciosidad e incluso hasta faltas a la ética cuando estas empresas absorben a quienes estuvieron a cargo de vigilarlas”, afirmó el Dr. Eurolo.
El facultativo manifestó la necesidad de cambiar o perfeccionar el sistema de control de las isapres, de modo que éstas sean mejor reguladas y fiscalizadas por un organismo que realmente tenga poder para hacerlo. Un mejor sistema de control evitaría abusos como los que las isapres cometen contra los pacientes al subir arbitrariamente el precio de los planes de salud so pretexto de que las clínicas (de las que son propietarias) también han incrementado sus costos. Y, por otro lado, también se evitarían los abusos contra los prestadores individuales (médicos), quienes individualmente no tienen ningún poder de negociación frente a estas grandes empresas.
“Las isapres pretenden que los médicos negociemos individualmente con ellas, en una especie de David y Goliat, pero invertido porque aquí siempre gana Goliat. Esto nos ha obligado a formar grupos de médicos bajo la ley de asociaciones gremiales, quienes han tenido que organizarse para poder lograr una equiparidad en la negociación que permita obtener un pago más justo por el trabajo que realizan. Porque las isapres pretenden cobrarle lo más posible al beneficiario (afiliado) y, por otro lado, pagar el precio más bajo posible al prestador (médico). Eso explica las gigantescas ganancias que tienen las isapres”, explicó el presidente regional del Colegio Médico.
Finalmente, el dirigente se mostró confiado en que esta vez sí se apliquen las sanciones que correspondan y se termine con este incentivo perverso de que el pagador sea también prestador.